miércoles, 25 de abril de 2007

 

HAIGA PAZ

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Una mierda la paz, hijos de putaza. ¡¡Gora ETA!! ¡¡Viva Satanás y el KKK y el Real Madrí!! ¡¡Surdo!! ¡¡Asafata!! ¡¡Julita!! ¡¡Ahora vendrá BenPuta a decir algo!! ¡¡1975!! ¡¡Noséqué!! ¡¡El Tourette!! ¡¡¡La pastillaaaaaaaa!!!

Etc.
 
Eooo, quita esa foto y pon una tía buena y sonrosada...si es que quieres que haya paz, zoofílico de postal.
 
Propongo a Paz Vega post-quirófano.

O a María de la Pau Janer.
 
Una duda que me corroe: ¿es verdad eso que dicen los (tacháaan) Medios De Comunicación, que si no tienes una cuenta en Second Life no eres nadie?

¿Aguien ha probado eso?
 
¿Llegará el día en el que sólo nos relacionemos con avatares, y jamás con otras personas de carne y hueso?
 
eso, eso, que venga vesputa a iluminarnos con su idiocia zen!! El tourette, el tourette!!
Fruno, el detective penibético
 
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
 
Yo con los universos virtuales ya tengo bastante con la vez que probé en el Ogame, el cual abandone a la semana, por pura exasperación...Recuerdo que me hice unas casitas en un lejano universo y allí quedaron abandonadas a la mano de Dios, de Dios y de Don Julito (si es que todavía está enganchado al juego) que fue quien me lo dió a conocer.
 
despues del infierno
siempre viene la primafiera
estrañoles..tranco ha muerto
viva estraña!!!
 
Si se fijan, en la foto salgo yo (por parte de madre), o sea, la chinchilla.

A mí me parece una foto muy sexy. En mi último libro publicado, LA CANCION DEL AMOR, dos jóvenas, aparte de hacerse cositas entre sí, se introducen animalillos de sedoso pelaje por los orificios de rigor. Ignoro si en la realidad esta parafilia se practica pero me parece mucho más sibarítica y ecológica que andar jugando con paratos de sex-shop.
 
claro surdo, aluego se autoodiarán... las pebetas, digo.
Alguna era asafata?? ESe es el libro que le editó MB??
 
conejos dentro de conejos!!! es lo primero que oigo...¿Y la moda instaurada por Cicciolina de anguilas y serpientes? Será que lo que cambia es la facilidad de encontrar ciertos animales, si no no me lo explico.
 
No, señor del Cono Sur (¿de negra cabesita, tal vez?), el autoodio para el que se lo trabaja.
Vicky, si me he equivocado contigo, desde aquí te pido perdón, pero no me negarás que aquí sí hay gente con autoodio, freno y marcha atrás (tú me dirás a qué viene todo este guirigay donde ya no tengo ni arte ni parte -salvo que opinar sobre la estética de una portada de disco cuyo contenido desconozco y en ningún momento he prejuzgado, sea para convocar el tribunal de La Haya-).
En fin... Ahora reconocerás que son otros los pesaos, pesaos, pesaos.
 
Pesao, y además ignorante y cenutrio.

Me vengo riendo monstruosamente de la chorrada que ha dicho el maestro de música anónimo desde el post anterior...

¡¡¡Viva el re menor!!!
 
a Mr Sin:
qué sucinta y poéticamente expresado (es casi un haiku), CONEJOS DENTRO DE CONEJOS.
¿Si usted tuviese por la parte de las ingles más orificios que protuberancias, no le resultaría más grato el contacto trémulo de un gazapillo de Angora que la viscosa frialdad de una pitón o que la impersonalidad pláxtica de un dildo (por no hablar ya de las muy pervert, que directamente juegan con el rallador de nuez moscada)?
 
Bueno, todo sería cuestión de que los gazapillos no perdieran pelo, como Mario Gil unas décadas atrás...entonces me lo pensaría. De todos modos a la frialdad de un reptil siempre se le puede dar solución al bañomaría, claro que sin excederse con la temperatura claro, que como dice 77 los animales también son personas.
 
Hombre, es que mis pebetas elijen sus criaturillas por el pelo (si no, usarían bolas de billar americano -el diámetro es similar-). Y estos bichos con pedigree se conservan bien, nada de mixomatosis o de pelagra (o tampoco se trata de meterse una cría de porcupine -bueno, esto lo mismo les iría a las del rayador de nuez moscada-).
Tengo que desarrollar esto en mi blog: qué buen empleo para mi vejez, diseñador de parafilias para mujeres con spleen (esto bien montao, con su campañita de marketing, lo mismo me compensa de mis pérdidas filatélicas -¿se encontrará en las arcas de AFINSA el sello ese de Carpanta?-).
 
Zurdo, está claro que tú te tenías que casar con Espinete.
 
Oiga, sin faltar, en todo caso, con el monstruo de las galletas (haríamos una versión aún más sacada de quicio del tándem Lemmon y Matthau). Espinete, con ese color y esa voz... uff, qué grima.
 
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